‘Diamantes negros’ desvela el lado más oscuro del fútbol. El director Miguel Alcantud, responsable de filmes como ‘Impulsos’ y ‘Anasteszi’, denuncia el reclutamiento ilegal de promesas del balompié en África a través de la historia de dos chavales de Mali que son fichados para jugar en equipos de la Península ibérica.
El realizador ha confesado que ha utilizado su experiencia personal para escribir el guion de una película que se alzó con el Premio del Público del pasado Festival de Málaga. “El germen de ‘Diamantes negros’ nace de mis trabajos en Mali cooperando con la Fundación Voces, allí conocí la miseria de uno de los países más pobres del mundo y entendí perfectamente esa desesperación que te hace agarrarte a cualquier oportunidad que tengas para salir y sacar a tu familia de esa pobreza. Conocí una serie de personas que se aprovechaban de esa necesidad para hacer negocio… y desde ahí me puse a investigar”.
‘Y me fui a Noruega -añade en sus comentarios para el Press-book del filme-, donde dirigentes del Chelsea tenían escondido a John Obi Mikel del Manchester United hasta que cumpliera 18 años, dónde llevaron a tres chicos nigerianos para que la “inversión” no tuviera añoranza y se echara a perder. Allí contacté también con Ronny Van der Meij, abogado especialista en derecho deportivo que me dio valiosísima documentación de sus estudios, de la que sobresale un dato escalofriante: Actualmente en Europa hay unos 20.000 chicos africanos que vinieron a jugar al fútbol siendo menores y que sobreviven en la calle”.
La película está protagonizada por los desconocidos actores malineses Setigui Diallo y Hamidou Samake, que encarnan a la pareja de jóvenes promesas del fútbol que acuden a España en busca de una vida mejor. Les secundan los españoles Carlos Bardem y Guillermo Toledo, como un par de ojeadores profesionales.