Pese a que el despliegue publicitario de esta ‘Cruce de caminos‘ parece querer apelar al recuerdo de ‘Drive’, también protagonizada por el actor Ryan Gosling, la película del director Derek Cianfrance (en su segunda colaboración con el actor tras la aclamada ‘Blue Valentine’) no tarda demasiado tiempo en distanciarse del territorio oscuro y referencial de aquella película. En ‘Cruce de caminos’ el delincuente interpretado por Gosling tiene similar aire taciturno y hasta anónimo, por no mencionar el aprecio que dispensa a su inseparable máquina, aunque en este caso vaya sobre dos ruedas.
Pero el increíble giro de los acontecimientos que Cianfrance presenta poco después de la primera media hora de metraje, y que sin duda haría las delicias de cualquier émulo de Hitchcock, nos conduce a una película completamente distinta, mucho más cercana al terreno del drama familiar en formato épico (por mucho que esta expresión pueda confundirnos, por lo señalado hasta ahora) que al del thriller en cuyos abundantes recursos y tópicos el realizador se apoya de manera continuada.
‘Cruce de caminos‘ hubiera sido, tal y como está planteada, una excelente novela, uno de esos dramas en clave heroica que reflexionan sobre el azar, el destino y la herencia a través del retrato de generaciones de personajes. El problema es que es una película, y esa estructura tan marcada que presenta perjudica alguna de las tres partes que la componen. La mejor es, sin duda, la protagonizada por Gosling, segmento en el que la cinta adquiere propiedades más magnéticas. Al pobre Bradley Cooper le toca bailar con la más fea, en tanto su participación lidia con los tópicos de un policial trivial, y además parece prolongarse de manera innecesaria. Pero es que aún después de eso queda película por delante: la particular dialéctica de ‘Cruce de caminos‘ hace que su duración se prolongue hasta mucho más allá de las dos horas, y sólo media hora antes de que finalice el asunto comenzamos a decidir sobre lo que estamos viendo.
No obstante, y pese a los desequilibrios que se desprenden de ello, la película de Cianfrance logra sostenerse por si sola y a lo mejor incluso llegar a la meta. Sin lograr un impacto dramático permanente, resulta de agradecer la búsqueda de una poética propia y arriesgada, a lo que sin duda ayuda la fascinante banda sonora de Mike Patton. Derek Cianfrance ha firmado una película interesante que, lejos de resultar soberbia, consigue articular cierta lírica legendaria en su cruce de caminos y géneros, en ese trayecto del thriller policial al drama, y preservar ciertos enigmas más allá de ese realismo estilizado que se desprende de sus imágenes.
Título: Cruce de caminos
Título original: The place beyond the pines
Director: Derek Cianfrance
Género: drama
Duración: 140 minutos
Fecha de estreno: 6 de septiembre
Intérpretes: Ryan Gosling, Bradley Cooper, Eva Mendes
Cruce de caminos, tráiler español
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